Capítulo 6
—Mundano como siempre, ¿no? Al menos deberías configurar las
paredes o el techo.
Apareciendo en la “habitación” de Yuuki, su espacio de realidad virtual
privado, Ran miró alrededor antes de hablar en un tono exasperado.
A las únicas que se les permitía estar dentro de esta habitación
construida en la memoria principal del prototipo del Medicuboid número dos
eran actualmente Yuuki y Ran. Sin embargo, eso era si incluso podía eso podía
ser llamado una habitación, sin objetos fijos aparte de una cama sombria y
varias ventanas flotando al azar sobre la oscuridad circundante.
La mitad de las ventanas mostraban varia información del estado del
Medicuboid y las demás sitios web de noticias y televisión aleatorios. La
ventana más larga en frente reflejaba el interior del cuarto limpio como si fuera
visto por cámaras equipadas en el número dos en tiempo real y servían como
una ventana para mirar al mundo real desde el mundo virtual.
Acostada en el duro piso en pijamas, Yuuki miró hacia Ran, vestida de
forma similar, mientras respondía.
— ¡Esto está bien! Si personalizo este lugar muy realísticamente como
nuestra casa en Serene Garden, ¡creo que perderé la pista de si estoy en la
realidad o en un mundo virtual!
Acariciando el espacio a su lado con la palma de la mano, continuó con
lo que pensó más importante.
—Nee-chan, ¿qué tal si cantamos aquello por primera vez en mucho
tiempo!
—Si, si, eres una niña mimada, ¿o me equivoco, Yuu?
Ran se estaba sentando con una postura correcta mientras sonreía y
Yuuki puso su cabeza en su regazo, cerrando sus ojos. Justo cuando aflojó la
fuerza a través de su cuerpo, una suave mano acarició su cabeza mientras una
voz silenciosa cantaba.
Era una canción de Mamá Oca llamada “Hush, Little Baby”. Una que su
madre les cantaba muy seguido. Aunque las extrañas letras envolvían comprar
todo tipo de objetos extraños para un bebé, como un espejo, una cabra, o un
caballo y carreta, ella amaba todo eso de ella.
Aunque la voz de su avatar era sintetizada usando muestras del mundo
real como su cara, apenas sonaba. La suave voz que se extendía sonaba como
susurros y llenaba el espacio carente de paredes o un tejado.
So hush little baby, don’t you cry,
Daddy loves you and so do I.
Daddy loves you and so do I.
Concluyendo la canción con ese verso final repetido, Ran continuó
acariciando su cabeza por un rato.
Con el tiempo ya pasado las diez en punto también, Yuuki vacilaba entre
la vigilia y el sueño, y Ran le pasó un dedo en la frente.
—Vamos, Yuu, no te duermas. Aun tenemos que discutir nuestro tema
principal.
—*Bostezo*… ah, es cierto…
Esforzándose mucho en levantar sus párpados cansados, se levantó a ella
misma con un *oof*. Sentándose al lado contrario de su hermana mayor,
murmuró con sus brazos cruzados.
—Si…… ¿Qué vamos a hacer, nee-chan?
Ni siquiera Ran con su habitualmente rápida determinación tuvo una
respuesta inmediata esta vez.
La sugerencia que les dio Merida repentinamente esa tarde: Su deseo de
visitar a Yuuki y Ran dos días después, el vigésimo tercero, y celebrar sus
cumpleaños. Por supuesto, no en un mundo virtual, sino en el Hospital General
Kouhoku en Yokahama en el mundo real.
Merida fue admitida a un hospital en el distrito Shinagawa de Tokyo, así
que no tomaría ni una hora en carro. Su familia naturalmente la acompañaría y
no había realmente un problema para Merida.
Sin embargo, Yuuki y Ran no pudieron decirle inmediatamente a Merida
que le darían una calurosa bienvenida. Después de todo, incluso si se molestaba
en ir, Yuuki no podía reunirse con Merida en persona debido a la
confidencialidad del Medicuboid y tampoco podía explicar por qué.
Ella estaba extremadamente feliz de que Merida llegara al hospital
incluso si no podía reunirse con ella directamente. Incluso si sólo Ran podía
verla, sería una felicidad pura escuchar sobre eso más tarde.
¿Pero que pasa si Merida no podía aceptar cuando le dijeran “no puedes
reunirte con Yuuki”…? ¿Qué si eso significaba perder su primer amiga hecha en
mucho tiempo…?
—…….Vamos a creer en Merida.
Ran rompió el silencio así.
—Nee-chan… pero…
—Si es Merida, estoy segura de que comprenderá incluso si le decimos
que no puede reunirse contigo debido a tus circunstancias, Yuu. No creo que se
ponga realmente furiosa gracias a eso. Además… si Merida lleva consigo su
AmuSphere y hace inmersión conmigo desde mi habitación del hospital, ella
puede venir aquí, ¿o no?
—Eh, ¡¿la vas a traer aquíííííí?!
Ella gritó inconscientemente y Ran asintió con una mirada juguetona.
—Estoy segura de que a Merida le encantará también, si tenemos una
fiesta de cumpleaños en tu cuarto, Yuu.
—C-claro… supongo que lo personalizaré para que sea un poco más
femenino…
Yuuki escudriñó a través del oscuro espacio que prácticamente gritaba
realidad virtual mientras murmuraba y Ran palmeó su hombro antes de
levantarse.
—Será mejor que te apures. Sólo tienes hasta el día después de mañana…
Sin embargo, no te voy a ayudar.
—Eeeeh…
—Simplemente tienes que hacerlo como te guste, Yuu, estoy segura de
que Merida lo preferirá así. Bueno, debería de regresar ahora. ¿Debo decirle a
Merida que es bienvenida?
—... ¡Claro!
Yuuki se puso de pie también y asintió con fuerza. En vez de encogerse
debido a su miedo a lastimar o ser lastimada, ella lo confrontaría directamente.
La misma Merida le enseñó a hacer eso.
Ran se fue después de desearle las buenas noches y Yuuki le dio otro
vistazo a su propia habitación virtual. Una fiesta de cumpleaños necesitaría
unas cuantas mesas y sillas más. Y más importante, paredes y un techo.
Incluso si fuera reajustado en un solo día, igual pondría su corazón en el
remodelamiento, para hacer que su preciada amiga se sienta bienvenida.
Decidiéndolo así, Yuuki se volteó en dirección a la ventana de configuración
que había estado expuesta todo este tiempo.
††††††††††††
Martes, 23 de Mayo, 2 PM.
Merida llegó al Hospital General Kouhoku de Yokohama en un carro
conducido por su madre.
Merida estaba en una silla de ruedas ya que sus piernas estaban
paralizadas por los efectos del tumor cerebral, pero aparentemente, ella hizo
que su madre esperara en el café del hospital y se trasladó a la habitación
privada de Ran en el octavo piso por su cuenta. El gran bolso que trajo consigo
contenía dos paquetes, sus regalos de cumpleaños, y un AmuSphere, y el plan
era hacer inmersión en el cuarto VR (Virtual Reality – Realidad Virtual) privado
de Yuuki con Ran desde su cama.
Pero…
Ni Yuuki ni Ran se enteraron de lo que Merida mantenía profundo en su
corazón.
Haciendo lo suyo en el baño antes de la inmersión, Ran regresó a su
cuarto privado para ver una carta escrita a mano sobre su cama y a Merida,
quien ya estaba en inmersión completa a la par de ella. Sobre su cabeza, que
sufría de pérdida de cabello como un efecto secundario de las drogas
anticancerígenas, no estaba el AmuSphere que ella trajo consigo, sino el Nerve
Gear de Ran.
La carta que comenzaba con una disculpa sincera para Ran y Yuuki y
describía los verdaderos sentimientos de Merida y que la tarjeta del juego
“Sword Art Online” estaba insertada en la ranura del Nerve Gear.
— ¡Eh……!
Obviamente informada de los eventos por Ran quien apareció en la
bellamente personalizada habitación VR, Yuuki necesitó varios segundos antes
de que entendiera la situación.
Merida no estaba usando el AmuSphere que trajo sino el Nerve Gear de
Ran. Eso era porque, ella no podía correr “SAO” en un AmuSphere. En otras
palabras, la inmersión de Merida no fue algo impulsivo sino premeditado
desde el comienzo ya que había traído la tarjeta para SAO. Había saltado dentro
de ese mundo virtual, un verdadero juego mortal, por su propia voluntad.
El Nerve Gear de Ran estaba modificado con medidas de seguridad
como una batería de una menor capacidad o un limitador. Pero el Nerve Gear
normalmente usaba un cable de energía. La toma de corriente en la pared
proporcionaba suficiente energía para destruir el cerebro del usuario cuando su
HP llegara a cero en SAO. Ellos no podían probar muy bien en Merida si el
limitador podía hacer su trabajo.
— ¡Oye… nee-chan! ¡Tenemos que apurarnos y sacarle el Nerve Gear a
Merida!
Yuuki como si la temperatura virtual hubiera caído en picada mientras
gritaba y Ran sacudió la cabeza rápidamente en respuesta.
—No podemos… no podemos tomar el riesgo removiéndolo por la
fuerza desde afuera.
— ¡¿Por qué?! La batería de tu Nerve Gear fue hecha más pequeña, ¿no?
Si lo desconectamos desde la fuente, no debería haber ninguna onda de radio
peligrosa…
—Merida tiene un tumor en su cerebro. Podría haber efectos adversos si
es expuesto a niveles anormales de ondas de radio incluso por un instante. No
podemos removerlo por la fuerza sólo por nuestro propio juicio.
— ¡Entonces, démonos prisa y llamemos a un doctor…!
Dándole un berrinche infantil a su hermana mayor quien permanecía
tranquila a pesar de la situación, Yuuki gritó con todo lo que tenía.
Sin embargo, Ran no lo concedería. En su lugar, puso sus manos en los
dos hombros de Yuuki y susurró para tranquilizarla.
—Yo también creo que deberíamos hacer eso. Pero dame algo de tiempo
antes de eso, sólo dame cinco… no, tres minutos serán suficientes.
—Tres minutos… ¿para qué?
Yuuki preguntó de vuelta y Ran respondió mientras contemplaba con
firmeza sus ojos.
—Aun debemos hacerlo con tiempo. Ven conmigo, Yuu.
Invocando una puerta que se doblaba como un lanzador de aplicaciones
al cuarto VR, Yuuki caminó con Ran y entrecerró los ojos ante el flujo de la
brillante luz del sol.
La parte este de Serene Garden, Pueblo Roite. Ahora en un vestido verde
de una pieza, Ran corría salvajemente a través de la plaza central mientras una
pequeña banda de NPC’s tocaba una tranquila música de fondo y los jugadores
sentados en bancos conversaban harmoniosamente. Yuuki, también, la seguía
con prisa.
Ella ni siquiera podía imaginar a donde se encaminaba su hermana
mayor o por qué fueron a Serene Garden en primer lugar. ¿No estaba Merida ya
en el castillo flotante, Aincrad, donde tomaba lugar Sword Art Online?
Posiblemente no hay una puerta hacia SAO desde Serene Garden.
Sin embargo, Ran continuaba corriendo sin titubear y pasó bajo la puerta
del pueblo antes de salir hacia las verdes colinas que se desplegaban, los
campos de Teal Hills. Aunque ella corrió sobre el camino pavimentado de
ladrillos un momento, eventualmente lo dejó dirigiéndose hacia la izquierda y
corrió directamente a través de los pastizales verdes.
Yuuki sólo se dio cuenta de hacia dónde se dirigía su hermana mayor y
la razón para eso después de cruzar numerosos montículos y ver una pequeña
superficie brillante de agua azul por delante.
Los postes rodeaban el estanque de veinte metros de ancho con un solo
árbol de pie a su lado.
Allí era en donde Yuuki atrapó al escarabajo ciervo «Royal Triton».
Y en donde conocieron a Merida.
Los dos ojos de Yuuki se abrieron ampliamente y se encontraron con una
pequeña silueta agachada en las raíces del árbol. La verde cola de caballo se
sacudió con el viento y brilló con la luz.
Pasando corriendo a su hermana mayor hacia la orilla del estanque con
ofuscamiento, Yuuki gritó un nombre justo cuando la silueta se levantó.
—...... ¡¡Merida!!
La conmoción recorrió la expresión de su amiga mientras se volteaba
antes de que cayera en una que parecía estar en conflicto entre llorar y sonreír.
La voz que llamó los dos nombres sonó más débilmente de lo que había oído
antes.
—……Yuuki...Ran.
Yuuki bajó la velocidad poco a poco y se quedó a una corta distancia de
Merida, Ran la alcanzó en poco tiempo.
¿Por qué Merida había inmergido en Serene Garden a pesar de usar el
Nerve Gear en un intento de llegar a SAO? La razón yacía en los pies de Merida.
Una caja de insectos con su tapa abierta y un escarabajo ciervo azul claro
encima de ella. Desarrolado varias veces más grande que la primera vez que lo
vieron, el escarabajo ciervo movía lentamente su antena como si interrogara a
su propietario.
Siguiendo la mirada baja de Yuuki, Merida habló con una sonrisa que
pertenecería a un niño conteniendo las lágrimas.
—……. Roy simplemente no se iría volando, ves. Originalmente quería
regresártelo a ti, Yuuki, pero los insecyos no pueden ser dados a otros después
de que su propietario es decidido… así que pensé que podrías atraparlo de
nuevo algún día si lo dejo aquí……
Algo caliente se sintió atrapado en el pecho de Yuuki en el momento en
que notó las grandes gotas reuniéndose en los ojos de Merida mientras decía
eso con voz ronca. Ran respondió desde su lado, sonando como si estuviera
conteniendo las lágrimas también.
—Roy no escapará. Tú tomaste muy buen cuidado de él, día tras día,
Merida. Definitivamente ganará el torneo para ti también. Así que… volvamos
juntas con Roy, Merida. Nadie más sabe sobre esto aun, sólo Yuu y yo.
Ella finalmente comprendió por qué su hermana mayor no le informó al
Doctor Kurahashi de la situación después de escuchar esas palabras.
Incluso si el Nerve Gear era quitado de la cabeza de Merida con el juicio
de Kurahashi, como un doctor, él tenía que decirle a su madre. Eso significaría
que tendría que dejar de recibir cuidado paliativo con realidad virtual a través
del AmuSphere y nunca sería capaz de hacer inmersión en Serene Garden o
Asuka Empire de nuevo. Ran había apostado a la posibilidad de persuadir a
Merida allí para evitar ese final.
Después de tomar bastante aliento, Yuuki le lanzó palabras llenas con
todos sus sentimientos a su amiga cercana.
—...Por favor, Merida, no vayas a SAO. Quiero tener más aventuras
contigo, Merida. Quiero viajar más, para visitar más lugares contigo. Así que…
¡así que…!
Sin embargo, Merida bajó lentamente sus ojos y se forzó a decir palabras,
una tras otra.
—… Lo siento, Yuuki. Lo siento, Ran. Yo sé que es su cumpleaños, pero
sigo siendo una gran molestia… realmente lo siento. No te pediré que me
perdones. Pero… Yo… sigo teniendo que……
Sus dos hombros bajo su camisa temblaban mientras se llenaban de
fuerza. Su tensa voz, tan débil como un frágil vidrio, se escuchaba a través de
las llanuras cubiertas de hierba en la tarde.
—… Lo vi en las noticias hace tiempo. La policía está planeando remover
forzosamente los Nerve Gears de las victimas del incidente SAO a lo largo del
país. Pero no creo que forzarlo funcione. Definitivamente habrá muchos
sacrificios…
Había pasado poco más de diez días desde que su hermana mayor le
enseñó ese artículo en aquel montículo cerca de aquí. Ran había hablado de esa
misma preocupación, entonces Merida dijo.
—…Yo lo mencioné, ¿cierto?, que en SAO, había varios miembros del
gremio en el que estaba durante la prueba beta, debería haber estado en el
lanzamiento oficial también. Yo, solo, fui salvada porque ellos detectaron mi
enfermedad… pero realmente, eso siempre me ha, siempre me lastima. Si… si
tan sólo pudiera entrar en Aincrad, incluso ahora, podría usar la vida que me
queda por el bien de todos; siempre he pensado eso. Si pudiera… podría haber
sido capaz de dejar atrás un propósito por el que he vivido…….
—…….Merida…
Yuuki dio un paso adelante mientras la llamaba por su nombre. Sin
embargo, Merida sacudió su cabeza violentamente mientras retrocedía. Sus
lágrimas esparcidas brillaban en dorado cuando la luz del sol las reflejaba.
—…Por favor, Yuuki, Ran. Déjenme ir a Aincrad. Hay victimas de SAO
en este hospital también, así que puedo pasar el filtro de direcciones IP. Mis
padres pueden ponerse tristes, pero creo que lo comprenderán. Yo… quiero
encontrar uno. ¡Un propósito para el cual nací en este mundo…!
Su ferviente monólogo se extendía con el viento cruzando las llanuras de
hierba y se dispersaba en la atmósfera virtual.
Merida dijo lo mismo el día en que se conocieron. Y una vez más, Yuuki
no pudo encontrar palabras de respuesta. Ella quería encontrar un propósito
para su vida, Yuuki, también, escondía ese deseo dentro de si misma.
Yuuki se quedó quieta y Ran avanzó desde su lado sin hacer ruido.
Se agachó lentamente y recogió con suavidad a Roy de la caja de insectos
con su mano izquierda. Acariciando suavemente las brillantes alas delanteras
del escarabajo ciervo que se quedaba mansamente en su mano, ella habló con
calma.
—Hay muchas, muchas razonas para que vivas en Serene Garden, en
Asuka Empire, y en el mundo real también. Tú fuiste la que cuidó de Roy tan
espléndidamente, y tú fuiste la que nos trajo a Yuu y a mí ante ese nuevo
mundo. Sé que encontrarás muchas más en el futuro también.
—…………
Merida contempló a Ran y al escarabajo ciervo sobre su palma con sus
dos ojos rebosando de enormes lágrimas.
Su boca formó una sonrisa débil en poco tiempo, y la chica ligeramente
mayor habló.
—Me haría muy feliz que ustedes sintieran que han obtenido algo de mí.
Pero… lo que realmente quiero no puede ser encontrado aquí, en Asuka, o
incluso en el mundo real. Yo… quiero pelear. No quiero simplemente esperar
mi final en la cama de un hospital… Quiero pelear contra algo más grande que
la enfermedad… como el destino, o el mundo, y darle a mi vida un calor final
con eso. Así que… por favor, Ran. Déjame ir.
—……… Merida……
Yuuki lo supo al escuchar el susurro de su hermana mayor.
Ran… Aiko poseía una “empatía” mucho más fuerte que la de Yuuki.
Tenía la fuerza para acompañarlas a través de sus sufrimientos y angustias,
para entenderlas, y para aceptarlas…
Por lo tanto, Ran podía simpatizar incluso con los sentimientos actuales
de Merida. Se inclinaría a querer concederle sus deseos.
Pero.
…Pero.
Si dejaba que Merida fuera allí, Ran sin duda sufriría mucho más
después. Se arrepentiría de sus palabras, de sus decisiones, y se vería obligada a
continuar asumiendo un pecado irremediable.
Por lo que, Yuuki tenía que abrir su boca ahora. No podía dejarlo todo a
su hermana mayor como siempre; tenía que hacer que Merida se rindiera con
sus propias palabras e intenciones.
Agarrando sus dos manos con fuerza suficiente para hacerlas temblar
desde el centro, Yuuki gritó.
—…… ¡¡Merida!!
Viendo firmemente esos dos ojos esmeralda que brillaba sorprendidos
ante su repentino grito, ella gritó una vez más.
— ¡Entonces lo encontraré para ti! ¡Encontraré un propósito con el cual le
des calor a tu vida! Así que… así que, ¡¡no te vayas, Merida!
Escuchando esa spalabras, Merida parpadeó de nuevo y mostró una
sonrisa confundida.
—…… ¿Cómo encontrarás eso para mí, Yuuki?
Yuuki no entendía por qué respondió así a esa pregunta tranquila. Pero
esas palabras tenían el poder de influir incluso en su propio destino.
—Lucha conmigo en Asuka Empire, Merida. Seguramente entenderás
después de eso.
